La inspección o supervisión en una obra, resulta ser uno de los puntos primordiales durante la ejecución de los proyectos, certificando que los requerimientos del diseño se cumplan.
El análisis minucioso de los métodos constructivos, y en especial el análisis de materiales que se van a utilizar en la construcción forman parte de los estrictos procesos de supervisión que deben realizarse en obra.
Cuando la obra a ejecutar es diseñada en hormigón armado uno de estos procesos se vuelve fundamental y capta la mayor atención en la ejecución de la obra: el control de calidad del hormigón.
Sobre el control de calidad recae gran parte de la responsabilidad debido a la integridad estructural de la edificación.
En el proceso de utilización de este importante material constructivo se realizan pruebas de campo, inspecciones visuales, mediciones, recolección y evaluación de datos, y una de las que más requiere atención es el análisis de laboratorio.
Dicho análisis está basado principalmente en el ensayo sobre probetas cilíndricas de hormigón, realizado por personal técnico especializado en la utilización del mismo.
El control de calidad del hormigón en obra se lleva a cabo principalmente bajo la ejecución de dos pruebas:
La prueba de asentamiento se realiza por lo general en obra, al llegar el camión con el material, justo antes de vaciar el hormigón.
Por su parte, la prueba de resistencia se realiza en el laboratorio de ensayo de materiales, su función es evaluar la calidad del hormigón elaborado y la resistencia característica que este tenga, verificando que se obtenga el material deseado para la obra.
Este procedimiento resulta ser un requisito en las licitaciones para poder obtener certificaciones o base para la solicitud de un anticipo económico.
Los ensayos al hormigón representan el primer paso para el proceso constructivo, entregando la muestra para un resultado que pueda ofrecer calidad y durabilidad de las estructuras que se fabriquen con este material.
Este paso tan importante permite tomar decisiones para perfeccionar desempeños y una buena ejecución de los procesos constructivos.
Los controles de calidad se hacen durante la fase inicial de construcción basándose en normas técnicas que son previamente establecidas de acuerdo al país en el que se ejecute el proyecto.
Es importante destacar que la toma de la muestra debe realizarse por un personal capacitado y conocedor sobre la manipulación y fabricación del hormigón, esto debido a que como no es un proceso complejo y realmente es fácil de manejar se crea mucha confianza y malas prácticas.
Tomar a la ligera este procedimiento conlleva a ejecutar pasos inadecuados que afectan directamente el resultado final, poniendo en duda la estabilidad y calidad del material y su responsabilidad o función en la obra.
Una operación ejecutada de forma correcta refleja el profesionalismo del laboratorista, fabricante o constructor que realice el procedimiento.
Los ensayos al hormigón se realizan en planta y en obra, habitualmente se presentan inconvenientes en los procedimientos e interpretación afectando y demorando en muchos casos el vaciado, lo que afecta la dosificación de la muestra debido a las tomadas de muestras en el inicio del fraguado.
Esto define la condición de aceptación o rechazo de la calidad del producto.
¿Qué debe contener este informe?
Otros datos que se deben tomar y plasma como parte del informe técnico a la hora de recepción del hormigón son: tipo de hormigón, suministrador del hormigón, número de matrícula del camión, hora de carga, hora de entrega, marca y tipo de cemento, contenido en metros cúbicos y alguna otra observación.